La empresa nacional argelina Sonatrach confirmó hoy haber rescindido el contrato sobre el proyecto gasístico Gassi Touil con Repsol-YPF y Gas Natural, al que califica de "fiasco industrial mayor". En un comunicado, la firma argelina se lamenta de la "tonalidad política gratuita" del anuncio hecho por las dos firmas españolas sobre la rescisión, acusándolas de "una tentativa de atribuir de manera injustificada la decisión de rescindir el contrato al Estado argelino".

"La rescisión intervino en aplicación de las cláusulas del contrato, debido a que Repsol-YPF y Gas Natural no ejecutaron sus obligaciones contractuales", afirma Sonatrach. Debido a ello, añade, "se han producido retrasos e incrementos de costos muy importantes y Repsol-YPF y Gas Natural han sido incapaces de enderezar la situación a pesar de las numerosas advertencias de Sonatrach".

La firma argelina recuerda que el proyecto debía haberse materializado en 2009 y que, según las últimas estimaciones de las empresas españolas, no se podría llevar a cabo antes de 2012. Sonatrach confirma haber iniciado un procedimiento de arbitraje contra Repsol-YPF y Gas Natural para pedir "una reparación sustancial" y añade que no está informada de la existencia de una petición similar de arbitraje por la parte española.

La empresa nacional argelina indica, por último, que el litigio es "un conflicto entre asociados puramente comercial, que se limita al proyecto Gassi Touil" y, en consonancia con ello, no afectará a otros proyectos existentes o futuros con los consorcios españoles. El comunicado de Sonatrach rompe el silencio de las autoridades argelinas sobre este caso, pero a juicio de medios del sector, no elimina el transfondo político del mismo.