El Mobile World Congress (MWC), la mayor feria de telefonía móvil del mundo, comienza hoy en Barcelona con dos grandes protagonistas: las tabletas y las aplicaciones. Los programas para los móviles se han convertido en una fuente de ingresos tanto para las operadoras como para los fabricantes, mientras que las tabletas buscan hacerse un hueco en los hogares gracias su renovada propuesta de entretenimiento. Mientras, los móviles tratarán de que nadie se olvide de ellos, con renovadas propuestas como el 3D, las consolas-teléfonos y sistemas operativos con aún más funciones.

El congreso, que se celebra en el recinto de Montjuïc de Fira de Barcelona, y que dejará en la ciudad 225 millones de euros, se olvida de la crisis con cifras cercanas a las del 2007: 1.300 expositores y entre 52.000 y 55.000 visitantes (por encima de los 49.000 de la pasada edición). Es una feria profesional, con la presencia de las principales compañías (Google, por primera vez, tendrá un gran estand propio) y, sobre todo, de sus consejeros delegados (Nokia, Twitter, Microsoft, Yahoo!, Telefónica, Vodafone).

MULTIUSOS Pero las estrellas del salón son los dispositivos, y este año las tabletas son protagonistas: aparatos táctiles ideados para consultar el correo y navegar, reproducir vídeos y leer libros electrónicos. Apple (no presente en el salón) relanzó esta categoría con el iPad y, a la espera de la segunda versión del dispositivo de la firma de la manzana, en el MWC se pueden ver, entre otras, la Motorola Xoom y la Blackberry Playbook (ya presentadas el mes pasado), además de la Samsung Galaxy Tab 10,1 (por su pantalla) y tabletas de HP, LG, HTC y la china Huawei.

Sin embargo, el congreso no se olvidará de los teléfonos cada vez más inteligentes, tanto con nuevos terminales como con, sobre todo, los programas que los nutren. Las aplicaciones no solo agregan contenidos a los móviles, sino que son una gran fuente de ingresos tanto para operadoras como para fabricantes. Solo el pasado año se descargaron 6.400 millones de aplicaciones.

Por ello, este año más de 200 empresas de aplicaciones (el 25% más que en el 2010) estarán presentes en una zona propia, la App Planet, flanqueadas por RIM, Samsung o Nokia.

Precisamente, el nuevo consejero delegado de Nokia y antiguo directivo de Microsoft, Stephen Elop, descartó ayer en Barcelona el interés de Microsoft en adquirir la compañía finlandesa. Tras el pacto sellado el viernes entre los dos gigantes, mediante el cual la mayoría de los teléfonos de Nokia adoptarán el sistema operativo Windows Phone, los rumores sobre una posible adquisición por parte de la empresa de Bill Gates se dispararon. Elop dijo que ambas empresas pretenden solo compartir estrategia, recursos y beneficios.