Los cálculos del Gobierno apuntan a que el déficit público se reducirá desde el récord del 11,4% del año pasado al 3% en el 2013. Sin embargo, el desempleo no bajará al mismo ritmo: pasará del 18,8% del 2009 al 15,5% del 2013. Si la población activa no variase, esta caída supondría que habría unos 760.000 parados menos. El Programa de Estabilidad 2009-2013 señala que la previsible estabilidad de los precios y la disminución de los despidos provocarán una reducción del crecimiento de los salarios, lo que sumado a la esperada alza de la demanda y el consumo permitirá que a finales de este año comience a crearse empleo. Y que a partir del 2011 empiece un lento proceso de reabsorción del desempleo.