Telefónica obtuvo en los seis primeros meses del año un beneficio neto de 3.775 millones de euros, lo que supone un aumento del 9,4% respecto al mismo periodo del 2009. Los ingresos consolidados alcanzaron los 29.053 millones de euros, un 5,4% más en el semestre, dato que la compañía usó para destacar la "importante aceleración en el crecimiento de los resultados". El grupo atribuyó la evolución al crecimiento de los clientes, especialmente los de mayor valor (de móviles de contrato, que subieron el 14,3%; y banda ancha, el 25,2%). El grupo suma en total 277,8 millones de clientes.

Latinoamérica fue una de las regiones con mejor evolución. Los ingresos en este mercado alcanzaron los 12.063 millones, el 10,2% más. En cuanto a España, la compañía destacó "la lenta pero gradual recuperación de ingresos", que cayeron el 4,5%, hasta los 9.321 millones. Telefónica reiteró los objetivos financieros hasta el 2012 y la política de retribución al accionista a través de dividendos crecientes.