El grupo Telefónica multiplicó por cuatro el beneficio neto consolidado en el primer trimestre del año, hasta alcanzar 543,3 millones de euros (90.414 millones de pesetas). Los resultados contrastaron con la caída interanual del 12,9% en los ingresos (6.458,9 millones hasta marzo). La fortaleza del euro y las devaluaciones de las monedas latinoamericanas fueron la causa principal de la caída de ventas.

La compañía se benefició en el primer trimestre de la mejora de los resultados de sus filiales, además de la reducción de las amortizaciones y de los menores resultados extraordinarios negativos, derivados de la venta de inmuebles. La deuda neta se situó en el primer trimestre en 21.502,3 millones de euros, 1.030 millones menos que en el 2002.