Telefónica destinará 4.000 millones de euros (665.554 millones de pesetas) hasta el 2006 para la compra de acciones propias, una cifra que equivale al 7% de la capitalización bursátil --350 millones de acciones-- del grupo. El presidente de Telefónica, César Alierta, explicó que la operación busca dar salida al flujo de caja de 27.000 millones de euros que la compañía espera tener en el periodo 2003-2006.
Además, "ese flujo se dirigirá a pagos de dividendo de 0,4 euros por acción", dijo Alierta. En total se dedicarán a la remuneración de los accionistas 11.400 millones de euros. El cambio en la política de remuneración coincide con la nueva estrategia del grupo, que ha anunciado un modelo de negocio más flexible.
