El nuevo Código Técnico de la Edificación (CTE) aprobado por el Ministerio de Vivienda encarecerá las viviendas de protección oficial (VPO) en torno a un 10%, según la Asociación de Promotores Constructores de España (APCE), y no el 1% que anunció la ministra María Antonia Trujillo.

En la vivienda libre, el mercado asumirá el sobrecoste, pero en la oficial, que supone precios más bajos para el cliente, "el Gobierno tendrá que subir un 10%", dijo Manuel Martín, dirigente de APCE.

El presidente de los promotores, Guillermo Chicote, presentó ayer un manifiesto anticorrupción, que exige el final de "la discrecionalidad extrema" que las leyes dan a los ayuntamientos y que les permiten "la excepción". Pidió la revisión y el cambio de "todas las clasificaciones y calificaciones de suelo"; evitar la financiación de los ayuntamientos "con cargo al urbanismo"; introducir como delito en el Código Penal la financiación de partidos mediante favores urbanísticos; agilizar la burocracia de planes parciales y más control de las licencias.

Trujillo respondió que el CTE no dificultará que las viviendas se puedan vender a los precios oficiales y añadió "que abarata los costes" si se compara con promociones "teóricamente" baratas.