El ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, ha anunciado que el Programa Temporal de Protección por Desempleo e Inserción (PRODI), la denominada ayuda de 420 euros, se sustituye por un nuevo plan enfocado a la orientación y la formación de los parados, sobre todo, para aquellos que agotan la prestación por desempleo.

El ministro de Trabajo ha explicado que este nuevo plan de políticas de empleo incluye un ayuda económica, que no percibirán todos los desempleados y que estará vinculada al nivel de renta y a los cursos de formación.

El nuevo plan estará financiado por tres canales. Una parte de la financiación provendrá del ahorro del sistema de bonificaciones que se incluyen en la reforma laboral, mientras que otra parte se conseguirá del montante destinado a las políticas activas de empleo (2.300 millones) que se reorientará a planes de preparación de los desempleados.

Por último, el Gobierno prevé adelantar los fondos que recibe del Fondo Social Europeo, según explicó la secretaria de Estado de Empleo, Mari Luz Rodríguez, que destacó que el nuevo programa no estará basado tanto en la ayuda económica y sí en la orientación, la re-cualificación de los desempleados y su participación en los procesos de formación. Es decir, "da la vuelta al enfoque del PRODI", donde lo prioritario era la ayuda económica y luego los procesos de orientación y cualificación.

1.500 NUEVOS PROMOTORES

Además, el Gobierno ha aprobado la entrada a partir de febrero de 1.500 nuevos promotores de empleo, que se unen a los 1.500 que ya existen y que tendrán como objetivo prioritario atender a los parados, sobre todo a aquellos que agoten la protección por desempleo.

La secretaria general de Empleo indicó que el nuevo programa deberá ser abordado con los agentes sociales y las comunidades autónomas. En este sentido y preguntado por la posibilidad de que las comunidades autónomas financien parte del programa, el ministro dijo que el Ejecutivo es consciente de sus "dificultades".