Las organizaciones de transportistas desecharon ayer la idea de convocar una huelga a corto plazo contra los cargadores, pero advirtieron de que podrían hacer paros selectivos que afecten sólo a las empresas que se nieguen a repercutir el encarecimiento del gasóleo en las tarifas. Las principales empresas de transporte por carretera lograron ayer un compromiso de la patronal de cargadores AECOC para ajustar los precios al alza de los carburantes.

Este acuerdo alcanzado a primera hora de ayer sirvió para desactivar la tensión entre cargadores y camioneros. Tras la reunión del Comité Nacional de Transporte por Carretera, su presidente, Ovidio de la Roza, precisó que las tarifas tendrían que subir cerca de un 7% en el caso de los contratos que no hayan sido revisados desde el 1 de enero del 2003.

Según de la Roza, se ha llegado a un acuerdo con AECOC (que aglutina al 60% de los cargadores) para buscar un "procedimiento eficaz que asegure las revisiones de los precios". Con Aeutransmer y Transpyme no ha habido tal pacto, por lo que, según De la Roza, ambas se exponen a sufrir "paros o dejaciones de servicios".