Comienza hoy la décimo octava edición de la Feria Nacional del Queso de Trujillo, con un mayor número de expectativas que sus predecesoras, según el presidente del comité ejecutivo, Eloy Redondo, que destacó ayer la importancia que el evento está alcanzando a nivel internacional, además de su consolidación nacional que según explicó ya se ha producido hace mucho tiempo.

Para Redondo, la celebración ayer del Comité Plenario de los Quesos de Europa ha supuesto un gran impulso en la proyección tanto nacional como internacional del evento, algo que se ha reflejado de manera especial en el gran número de medios de comunicación que se han interesado este año por la feria, tanto a nivel nacional como autonómicos de Madrid y Barcelona principalmente.

A todo esto hay que unir el hecho de que los 6.000 metros cuadrados de la plaza mayor a duras penas consiguen dar cabida a los 120 stands que se han ubicado este año, en lo que supone un récord de participación. Pero al dato cuantitativo, Redondo unió los de la gran calidad de los quesos expuestos, más de 300 variedades entre los que se ven representadas un gran número de denominaciones de origen nacionales, y la diversidad del origen de estos quesos, que vienen de una gran parte del territorio español y de varios países europeos como Francia, Italia o Alemania.

De esta forma, el presidente del comité ejecutivo insistió en que si todos los años la feria nacía con grandes expectativas, la edición de este año podría suponer un punto de inflexión que coincidiría de forma simbólica con la "mayoría de edad" de la Feria del Queso, todo esto gracias también al trabajo que durante todo el año se viene realizando por parte de la organización de la feria a la hora de promocionarla en distintos eventos queseros como los de Ordizia y Arzúa en España, Melun y Saint Maire de Touraine en Francia, Crema en Italia y Lindemberg en Alemania.

De esta forma, para Redondo se vienen a recoger ahora los frutos de una importante labor realizada de forma continua, además de las presentaciones que se hacen en el Ritz y la Feria del Gourmet de Madrid, o en las capitales salmantina y cacereña, todo ello para que la Feria del Queso crezca cada año en popularidad, importancia y movimiento económico.