El Ministerio de Trabajo ha rechazado por fraudulento el ERTE presentado por Ryanair en sus bases de las Islas Canarias y Gerona y que afectaba a 206 trabajadores. Estos fueron los incluidos en el último despido colectivo efectuado por la empresa el año pasado en dichas instalaciones y que finalmente la Audiencia Nacional tumbó por irregularidades en las formas y «mala fe» negociadora por parte de la empresa.

Inspección de Trabajo ha considerado acreditado que la aerolínea de origen irlandés incorporó a los trabajadores readmitidos en un ERTE con la finalidad de ahorrarse costes laborales y no debido a una causa de fuerza mayor. Así figura en la resolución publicada ayer por el sindicato USO.

«Es evidente que la empresa presentó el ERTE para [...] así librarse, si no de toda, sí de una buena parte de la deuda económica que implicaba la anulación de los efectos de despido colectivo producido en 8 de enero del 2020», según recoge la resolución. Es decir, para ahorrarse los salarios de tramitación y otros costes derivados de la readmisión, Ryanair lo que hizo fue incluir a posteriori a los trabajadores readmitidos al ERTE que planteó para sus más de 1.400 empleados en toda España. Y que así fuera la Seguridad Social la que tuviera que asumir, desde la presentación del primer ERTE, la gran mayoría de los costes laborales.

La autoridad laboral obliga así a Ryanair a abonar las cotizaciones eximidas por esos 206 trabajadores afectados, así como a retornar el importe de las prestaciones por desempleo consumidas, además de pagar los salarios correspondientes a dichos trabajadores. H