Las grandes infraestructuras energéticas como el gasoducto Nabucco, que transportará gas desde las cuencas del Caspio y Asia central hasta Europa evitando el territorio ruso, son importantes pero solo significan una pequeña parte de la política de la UE en materia de seguridad del suministro. El portavoz de Energía de la Comisión Europea, Ferran Tarradellas, dice que el pilar de la estrategia comunitaria es la eficiencia y el ahorro energético, y el impulso de las energías renovables para que la producción autóctona y ecológica gane más peso.

La Comisión Europea estima que, antes del 2013, se necesitan inversiones por 30.000 millones de euros, de los que 19.000 deben ser en gasoductos para cubrir los objetivos de mejora de la seguridad del suministro. Solo Nabucco, el pilar en el que se sustenta el denominado "cuarto corredor" para traer gas a Europa, supone unos 7.900 millones de inversión.

La infraestructura, que funcionará en el 2014, cubrirá un 5% de la demanda europea. Participan en ella gasísticas de Turquía y cuatro socios comunitarios: Bulgaria, Rumanía, Hungría y Austria.