La comisión de Comercio Internacional del Parlamento Europeo dio este martes luz verde al acuerdo de libre comercio con Vietnam, un tratado que eliminará prácticamente todos los aranceles en los intercambios entre ambas partes en los próximos diez años, así como al de protección de inversiones entre los dos mismos bloques.

En un voto celebrado en la reunión de esta comisión, el acuerdo de libre comercio prosperó por 29 votos a favor, seis en contra y cinco abstenciones, mientras que el de protección de inversiones salió adelante por 26 a favor, siete en contra y seis abstenciones.

Ambos acuerdos serán sometidos al voto del pleno del Parlamento Europeo en su próxima sesión plenaria de Estrasburgo, entre el 10 y 13 de febrero.

De aprobarse en la Eurocámara, el acuerdo comercial entrará en vigor una vez lo concluya el Consejo, mientras que el acuerdo de protección de inversiones necesita también el visto bueno de todos los Estados miembros de forma individual.

ELIMINAR ARANCELES

Una vez en vigor, el acuerdo comercial eliminará los aranceles del 65% de los productos que la UE exporta a Vietnam, mientras que el 35% restante irá reduciendo sus gravámenes gradualmente en los próximos diez años.

En el caso de las exportaciones vietnamitas a la UE, el 7 % estará libre de impuestos adicionales desde la entrada en vigor del acuerdo y el resto irá quedando libre de aranceles en los próximos siete años.

En el caso de los productos agrícolas vietnamitas sensibles, como el arroz, el ajo o los huevos, se limitará la exportación sin aranceles.

El acuerdo protegerá hasta 169 denominaciones de origen europeas, entre ellas el vino de Rioja o el queso parmesano, y 39 vietnamitas, y mejorará el acceso de las compañías europeas al mercado de la contratación pública del país asiático.

Según la Eurocámara, el acuerdo incluye normas legalmente vinculantes en áreas como el clima, los derechos laborales y los derechos humanos. El acuerdo podría suspenderse si se constatan violaciones de derechos humanos.

Según denunciaron algunos eurodiputados en sus redes sociales, como la ecologista británica Ellie Chowns, la embajada vietnamita hizo llegar una botella de champán a los diputados en la víspera del voto.

"Totalmente inapropiado y descarado. Se lo devolveré y les explicaré que la liberación de los presos políticos me influiría más", afeó la diputada británica.

Otros eurodiputados de esta misma comisión habían recibido una botella de champán como felicitación durante las fechas navideñas, una práctica habitual entre otras embajadas, señalaron a Efe fuentes parlamentarias.

Vietnam es el segundo socio comercial de la UE entre los países de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), solo por detrás de Singapur, y exporta principalmente material de telecomunicaciones, ropa y productos alimenticios, mientras que la UE vende a Vietnam maquinaria, productos químicos y productos agrícolas.