Los Veintisiete alcanzaron ayer un acuerdo para regular por primera vez los fondos especulativos, llamados hedge funds , a los que se responsabiliza de la especulación desenfrenada en los mercados y de ampliar los riesgos de crisis financieras por sus apuestas en busca de elevados beneficios a corto plazo. Los fondos especulativos gestionaron en el 2009 dos billones de euros a nivel mundial, el doble del PIB español, y han escapado hasta ahora a toda supervisión efectiva.

Gran Bretaña, la República Checa y Malta dejaron de oponerse frontalmente al proyecto de directiva de la UE al asumir los demás estados el compromiso de tener en cuenta sus preocupaciones en las negociaciones que se iniciarán con el Parlamento Europeo a final de mes para adoptar la nueva normativa. Con esta fórmula, el nuevo Gobierno británico evitó estrenarse en el Consejo de Ministros de la UE con una derrota. El nuevo Gobierno de David Cameron y Nick Clegg espera conseguir en la negociación con la Eurocámara que los fondos extracomunitarios puedan operar en el conjunto de la UE sin tener que lograr la autorización de cada Estado.

Londres, que gestiona el 80% de los fondos especulativos en Europa, logró retrasar dos meses la adopción del proyecto en el Consejo de Ministros de Economía y Finanzas de la UE con la excusa de las elecciones.

FONDOS DE TODO TIPO La nueva normativa pretende establecer un marco armonizado de control y supervisión de estos fondos para proteger a los inversores y operadores y prevenir nuevas crisis financieras en el futuro. La reglamentación se aplicará a los hedge funds y a los fondos de capital-riesgo, así como a los inmobiliarios, de materias primas y a todos aquellos que no estén sometidos a la normativa de fondos de inversión colectiva.

La nueva directiva exigirá a los fondos localizados en la UE obtener un permiso de las autoridades nacionales para operar en el mercado europeo. Los gestores de los fondos deberán respetar una serie de exigencias de solidez, gestión de riesgos y liquidez, y deberán facilitar de forma regular información sobre los principales mercados e instrumentos donde operan, así como sus principales posiciones y concentraciones de riesgos.

Los fondos deberán facilitar una clara descripción de sus políticas de inversión, incluyendo una descripción de los tipos de activos y del nivel de apalancamiento de sus operaciones a base de créditos.

RESERVAS DE EEUU El acuerdo político del Consejo de Ministros de la UE establece que los fondos basados fuera de la UE necesitarán la autorización de cada estado para operar en su mercado, siempre que faciliten un mínimo de información y el país de origen prometa cooperar en la supervisión de los riesgos.

Esta exigencia de la autorización de cada Estado para que los fondos extracomunitarios puedan operar en la UE preocupa a Gran Bretaña y Estados Unidos, desde donde se gestionan la mayoría de los hedge funds , porque esos fondos suelen tener su sede en paraísos fiscales.

NEGOCIACION La Eurocámara propone crear un pasaporte para esos fondos extracomunitarios que les permita operar en toda la UE, pero establece exigencias más estrictas que el proyecto pactado por los ministros de Economía para obtener el permiso, lo que dificultará la negociación. La Eurocámara prohíbe también a los fondos europeos invertir en empresas u otros fondos que no cooperen en la lucha contra el blanqueo de dinero o contra la evasión fiscal.