Siete meses después que el Gobierno ofreciera al mercado la compra del 49,9% de Alitalia, la privatización de la compañía de bandera se ha quedado sin pretendientes. El martes se retiró el último candidato en liza, y otros dos se retiraron algunos meses atrás. El fondo Matlin Patterson Global Advisers (MPG) sigue formalmente en competición, aunque sus aliados (TPG y Mediobanca) ya han renunciado. El Gobierno deberá ahora encontrar una solución de emergencia o afrontar la liquidación de la sociedad.

"Disponemos aún de varias posibilidades y la liquidación será la última", explicó el ministro de Transporte, Alessandro Bianchi, apuntando a la posibilidad de abrir negociaciones directas con potenciales compradores, lo que hizo remontar la vieja hipótesis de un acuerdo con Air France-KLM. Corrado Passera, consejero delegado del Banco Intesa-San Paolo, que apoyaba a AP-Holding, dijo que "las incertidumbres que pesaban sobre el comprador eran demasiado numerosas". Roma había impuesto la compra de al menos el 39,9% y a mantener su identidad nacional.

PERDIDAS Alitalia perdió en el pasado ejercicio 626 millones de euros y 135 en el primer trimestre de este. La compañía, que fue recapitalizada en el 2005 con 1.000 millones, explicó que cuenta con liquidez para un año. La acción perdió ayer 0,77 euros, el 3,66% de su valor bursátil.