Unicaja Banco SA ha hecho público esta mañana un comunicado donde informa de que ha iniciado contactos preliminares con Liberbank, previa información de su consejo de administración, para analizar potenciales oportunidades de inversión u operaciones corporativas que pudieran ser de interés para sus accionistas. Con ello confirma las conversaciones existentes entre ambas entidades con el objeto de plantear una hipotética fusión, una operación que ya se inició en entre 2018 y 2019 pero que finalmente fracasó por discrepancias en torno al canje del valor de las acciones para llevar a cabo la integración.

Los contactos con Liberbank, señala el comunicado de la entidad andaluza son, por el momento, con la participación de asesores externos, no habiéndose adoptado al respecto ninguna decisión por parte de Unicaja Banco.

La fusión entre CaixaBank y Bankia y la presión por parte del Banco Central Europeo (BCE) para que el sector bancario pueda llevar a cabo una concentración que le permita hacer frente con mayor fluidez a la crisis que se avecina ha provocado este nuevo paso.

La fusión de las dos entidades supondría crear el séptimo banco más grande del país. Unicaja tiene un valor de mercado de alrededor de 1.030 millones de euros, mientras que Liberbank de 691 millones. Ambas entidades cuentan con sucursales en Extremadura, si bien la segunda es la heredera de Caja Extremadura, la cual se integró en 2011 mediante un Sistema Institucional de Protección (SIP) con Cajastur, Caja Castilla-La Mancha y Caja Cantabria, al que aportaron los activos y pasivos del negocio bancario de cada caja de ahorros.