La compra de un coche nuevo ha sido aplazada por un buen número de personas para hacer frente a gastos más urgentes. Esa es la conclusión que saca el sector a la vista de que las matriculaciones de turismos por parte de clientes particulares descendieron el 9,2% en noviembre y acumulan una caída en el 2007 del 7,1%. Es la peor evolución de las matriculaciones que no provienen de empresas desde el 2002, cuando bajaron el 11,4%.

En conjunto, el mercado de automóviles y todoterreno español registró 125.199 matriculaciones en noviembre, lo que supone un recorte del 5,9% respecto al mismo mes del 2006 y un descenso acumulado en el 2007 del 1,9%. La mejora en las ventas de 4x4 (el 5,7% en noviembre), así como el incremento de matriculaciones de coches para flotas de empresas y de los propios concesionarios de las marcas para venderlos posteriormente como turismos de kilómetro cero amortiguaron el mal dato de los particulares.

El descenso de las ventas forma parte, según el vicepresidente económico, Pedro Solbes, de las "correcciones" lógicas para conseguir "un sistema más equilibrado" de crecimiento económico con "algo menos de consumo privado".

KILOMETRO CERO De las 125.199 matriculaciones de noviembre, 111.003 corresponden a turismos, según los datos de la Asociación de Importadores (Aniacam). El mercado particular sumó 72.256 coches, lo que equivale a un 65% de todas las ventas, un peso que ha ido bajando ante la demanda de las empresas. Además de las flotas, Aniacam advierte de que hay un gran número de automatriculaciones, los turismos que adquieren los concesionarios justo antes de que acabe el mes.

Los coches procedentes de automatriculaciones tienen un doble objetivo: el habitual de alcanzar un nivel mínimo para ampliar el porcentaje de ganancia y la especulación con modelos de gama alta que se venderán más caros en el 2008 al aplicar el nuevo impuesto de matriculación en función del CO2, según indicó Javier de Ulacia, responsable de créditos para automóviles de Banco Cetelem.

A su juicio, "el encarecimiento de las hipotecas ha enfriado las ganas de comprar coche desde el verano", lo que ha motivado que algunos intermediarios financieros nuevos en el sector "hayan dado marcha atrás por el temor a un aumento del riesgo". En este contexto, el responsable del sector de Cetelem ha detectado un aumento de alternativas financieras, como el renting , que ha pasado de ser solo para flotas de empresas a ser una fórmula para algunos particulares que pagan una cuota mensual que incluye todos los gastos del vehículo, y el alargamiento de los préstamos hasta un plazo de 10 años para reducir la letra mensual por la compra de un coche.

Los concesionarios, especialmente los más pequeños, están "muy tocados" por la pérdida de ventas y la menor rentabilidad del kilómetro cero. Además de los problemas generales, añaden la "previsible bajada espectacular" en la venta de coches de gama alta.