La actividad de la construcción residencial registró en el primer trimestre un repunte del 8%, que rompe la tendencia a la baja iniciada el pasado noviembre. La causa principal fue la entrada en vigor en su totalidad del nuevo código técnico de la edificación, en abril. La normativa obliga a incrementar las medidas de sostenibilidad, aislamiento y seguridad de las viviendas, y los promotores han apurado hasta el último momento de vigencia de la antigua norma para visar los proyectos de las nuevas residencias sin los costes derivados de la nueva legislación.

Esto explica que el primer trimestre del 2007 se cerrase con un aumento de viviendas iniciadas en España del 8% respecto al mismo periodo del 2006, según los datos del Ministerio de Fomento cuya fuente son los visados de obra nueva para uso residencial de los colegios de aparejadores. Entre enero y marzo se visaron 217.218 viviendas, 16.108 más que un año antes. El incremento se basó en los edificios de pisos, ya que las casas bajaron un 29,4%.

El efecto fue evidente en marzo, con 98.478 visados de obra nueva, casi el doble que en febrero y enero.