Vodafone no piensa quedarse con los brazos cruzados después de perder la comercialización del iPhone en Europa. La filial alemana de la compañía ha interpuesto una demanda contra su competidora T-Mobile, que se ha hecho con la exclusiva de comercialización del primer teléfono móvil de Apple, porque según la legislación alemana no es posible bloquear un terminal para que solo lo utilice una operadora. La sede central de la operadora paneuropea, sin embargo, confirmó ayer que la demanda solo se interpondrá en Alemania y que no afectará a ningún otro país europeo, de momento, porque se trata de una "ruptura de la legislación local alemana".

Apple comercializa su teléfono en exclusiva con una operadora de cada país, a la que cobra un porcentaje por los ingresos de tráfico derivados del uso del terminal. En EEUU, donde el mercado está mucho más segmentado y hay compañías que operan solo en algunos territorios, lo hace con AT&T. En Gran Bretaña, con la filial de Telefónica O2, y en Francia saldrá el próximo día 29 con Orange. En todos estos países, las operadoras exigen a los usuarios la firma de un contrato de permanencia mínima: dos años en AT&T y T- Mobile y 18 meses en O2. Orange todavía no ha hecho públicas las condiciones del contrato.

Vodafone Alemania quiere romper esta exclusividad y que el terminal pueda utilizarse en la red de otras compañías y sin contratos cerrados con una sola operadora. En distintos países europeos, cientos de usuarios utilizan el móvil pero tras romper con un programa informático las protecciones lógicas que impiden su uso. En Francia, ya se han detectado casos de venta de móviles desbloqueados a través de distintas tiendas on line .

La demanda de Vodafone, que ha sido admitida por un tribunal de Hamburgo, ha dado paso a una orden del juez por la que, de momento, se prohíbe la venta del terminal con el contrato de 24 meses, pero que admite que la tarjeta SIM bloquee su utilización con otra operadora.