Vueling, aerolínea con sede en Barcelona, ha perdido tres cuartas partes de su valor en bolsa desde marzo. En ese periodo, la compañía, cuyo primer accionista es Inversiones Hemisferio, de la familia Lara (Planeta), ha tropezado con la dura competencia de Spanair y de Iberia, que le ha forzado a desacelerar las previsiones de crecimiento. Empezó a perder altura en junio tras la salida de Apax de su capital. Pero el mayor desplome se ha producido desde agosto, cuando quintuplicó pérdidas en el primer semestre, hasta 33,7 millones. Tras valer en bolsa casi 700 millones en marzo, hoy apenas llega a 185.