Las dudas sobre la economía española siguen lastrando el mercado. El buen dato del paro nada pudo hacer contra el nuevo máximo histórico del diferencial entre la deuda pública española y la alemana, que se situó en 177 puntos básicos. La caída pudo ser mayor, pero una buena apertura de la sesión bursátil en Estados Unidos --impulsada por el buen dato de las ventas de viviendas pendientes, el más alto en seis meses-- evitó males mayores.

El Ibex 35 llegó a ceder en torno al 1%, pero logró recuperarse hasta cerrar la sesión con un retroceso del 0,34%, hasta los 9.268 puntos. Los expertos estiman que, mientras no se concrete la reforma del mercado laboral y las agencias de calificación dejen de bajar la nota a España, las suspicacias sobre el país continuarán.

Los inversores, además, tienen muchos frentes de incertidumbre abiertos, como la dimisión del primer ministro japonés, que tuvo ayer cierto impacto en los mercados asiáticos y condicionó la apertura en Europa. El selectivo español, en cualquier caso, fue el más penalizado. Cayó menos que el italiano (0,5%), pero más que el británico (0,23%), el francés (0,05%) y el alemán (sin variación).

Las entidades financieras siguen siendo las que más sufren debido a los temores sobre su capacidad para gestionar el impacto de la crisis económica y financiera. Cedieron el Santander (1,85%), Bankinter (1,51%), el Sabadell y Banesto (ambas el 1,86%) y el BBVA (1,26%). Entre los mayores retrocesos del día también se colaron las constructoras OHL (2,1%) y FCC (1,85%).

De los 13 valores que lograron subir, el más destacado fue Telecinco, que repuntó el 4,67% después de recibir un informe positivo. También se revalorizaron Red Eléctrica (2,19%), Enagás (1,95%) y Gas Natural (1,21%).

En el mercado continuo destacó nuevamente la caída de los derechos de Aisa, el 42,5%, mientras que, después de Telecinco (4,67%), la mayor subida recayó en Elecnor, con un alza del 4,58%.