El Ibex 35, el principal índice de la bolsa española, cedió ayer el 1,29% y perdió el nivel de los 15.300 puntos lastrado por sus grandes valores y la apertura en rojo de Wall Street. El selectivo se comportó peor que el resto de índice europeos y perdió 198,30 puntos, cerrando la sesión en 15.231,30 unidades. Los mercados europeos abrieron a la baja después de la caída del Nikkei en Tokio, que registró su mínimo mensual. Con el euro a 1,422 dólares y el barril de petróleo Brent al alza y por encima de los 84 dólares, las principales plazas europeas terminaron la jornada también con recortes: Fráncfort perdió el 0,18%; Londres, el 0,49%; París, el 0,53%; y Milán, el 0,36%.

El principal motivo de los descensos generalizados fue el anuncio del banco de inversión Merrill Lynch, que comunicó unas pérdidas netas de 1.577 millones de euros en el tercer trimestre. La mala noticia reavivó la preocupación sobre cómo la crisis crediticia e inmobiliaria afectará a los resultados empresariales y a la economía estadounidense en su conjunto, y la Bolsa de Nueva York abrió a la baja, lastrada también por la caída de un 8% de las ventas de viviendas de segunda mano el pasado mes de septiembre, el nivel más bajo en ocho años, peor de lo previsto por los expertos.

En el selectivo español, lideraron las pérdidas Inditex, que cedió el 3,59%; Iberia, que cayó el 2,35%; y Endesa, que retrocedió el 2,04%. Sacyr Vallehermoso, que rompió la barrera de los 29,4 euros, encabezó las ganancias de todo el mercado, con un repunte del 5,64% que situó sus acciones en 30,36 euros. El segundo puesto fue para Telecinco, que avanzó el 2,68%, y el tercero para Acerinox (+1,93%).

Entre los pesos pesados del mercado nacional, el BBVA cedió el 2,01%, pese al anuncio de un beneficio de 4.756 millones de euros hasta septiembre. El Santander perdió el 1,78%; Telefónica, el 1,25%; Iberdrola, el 1,36%; Repsol YPF, el 1,01%; y el Banco Popular, el 0,85%.