La bolsa neoyorquina recibió con frialdad los detalles del plan fiscal de Bush. El mercado registró un notable ascenso el lunes por esa razón, y ayer dio por hecho que las cotizaciones ya reflejan los beneficios económicos que pueden representar las medidas. A media sesión, el Dow Jones retrocedía el 0,7%. Aunque algunos analistas consideran que las medidas anunciadas pueden impulsar el consumo, "el estímulo será pequeño, ya que favorece a las familias acomodadas, que no cambiarán sus hábitos de gasto", según comentó Kevin Logan, economista de Dresdner.