En el momento que Luca de Meo anunció su decisión de abandonar la presidencia de Seat, todo el mundo empezó a pensar quién iba a ser su sustituto. La importancia del italiano en la dirección de la marca española y el impulso que le dio, puso de manifiesto la necesidad de encontrar un candidato que pudiese continuar con el camino. Ya en ese momento el nombre de Wayne Griffiths empezó a sonar con fuerza.

Mañana, 260 días después del adiós oficial de De Meo, Seat vuelve a tener un presidente, en cierto modo, 'de casa'. El Consejo de Administración de Seat (presidido por Herbert Diess) ha nombrado a Wayne Anthony Griffiths (52 años) nuevo presidente de la marca.

Wayne Griffiths buscará mantener el rumbo de Seat / SEAT MEDIACENTRE

Nacido en Dukinfield (Reino Unido) en 1966, ocupa desde 2016 el puesto de vicepresidente ejecutivo comercial de Seat y también es el presidente del consejo de administración y consejero delegado de Cupra. Su imagen dista de la de De Meo, pero no su ambición, creatividad y olfato para el automóvil. Podríamos decir que Seat cambia el traje de diseño italiano por la chaqueta de cuero premium.

El apoyo del Grupo Volkswagen

Griffiths siempre ha contado con el apoyo del Grupo Volkswagen (a quien pertenece Seat). Herbert Diess (presidente del consorcio alemán) ya señaló, el pasado enero en Davos, que el británico "es uno de los mejores profesionales que hay en el grupo". Para Diess, la continuidad era la clave para buscar la figura del nuevo presidente de Seat.

En los últimos años Griffiths ha sido el artífice para que las ventas de Seat crecieran un 40%, convirtendo a la marca en la de mayor más crecimiento en Europa de los tres últimos años. Este momento positivo se frenó por la pandemia, pero con Griffiths esperan recuperar el camino.

"Yo he visto lo de Seat y Cupra como una unidad, y pienso que promocionando a Cupra hacemos crecer a Seat. No se puede separar. No es una o la otra. Así lo entendimos con Luca y esa es la línea que vamos a seguir. En este sentido Wayne Griffiths está muy involucrado con la idea de Cupra y ha sido uno de los promotores de la marca. Tengo una cierta garantía que el cariño que siempre necesitas para dar vida a una marca sigue estando ahí". explicó Diess apostando ya en enero por el nombre de Griffiths.

Herbert Diess, presidente del consejo administración de Seat. / FERRAN NADEU

El Grupo Volkswagen puso a dirigir la marca a Carsten Isensee, aunque de forma interina. Ya en Davos, Herbert Diess nos anunció que "todo el mundo sabe, incluso él, que es una situación intermedia, provisional, pero va a ejercer muy bien esa responsabilidad". Ahora, tras esa presidencia provisional, Seat estrena máximo responsable. Griffiths cumple con los requisitos que desde el grupo alemán pedían: "Ser una persona que encaje y lo más importante es que se identifique con el plan Cupra-Seat", así lo especificó Diess.

Esa vinculación con Cupra y el estilo que Griffiths le ha dado desde su nacimiento como marca propia bajo el paraguas de Seat es lo que le ha valido la apuesta del Grupo Volkswagen por él. De Meo creó Cupra pero Griffths la ha hecho crecer. Este mismo año Cupra ha estrenado sede propia y su previsión de facturación de este año (antes de la pandemia) era de mil millones de euros.

Del concesionario a la presidencia

A Wayne Griffiths lo del automóvil le va en el ADN. Su padre tenía un concesionario de automóviles en Leeds y durante un tiempo trabajó allí. A nivel profesional siempre ha estado siempre vinculado al Grupo Volkswagen. Empezó en 1989 en Audi y, tras trabajar en Seat entre 1991 y 1993, regresó a Audi, donde ocupó varios cargos de responsabilidad en la nueva división comercial.

Griffiths, alma mater de Cupra. / CUPRA

Griffiths fue nombrado posteriormente asistente del miembro del Consejo de Audi AG responsable del área Comercial. De 1997 a 1998, dirigió el área de Retail Marketing Internacional y a partir de 1998 desempeñó distintas responsabilidades en la división de Ventas de Audi AG. Entre 2005 y 2013, fue el responsable de ventas en los mercados europeos de exportación. Hasta su nombramiento en Seat en 2016, Griffiths dirigía la red de ventas de Audi AG en Alemania. A partir de ahora se abre un escenario en el que la marca debe consolidar su posición de 'influencer' dentro del Grupo Volkswagen. Con Griffiths, seguramente, no habrá choque de trenes con la cúpula del consorcio.

La figura del británico está muy bien vista por la plantilla ya que lo consideran 'uno de los nuestros'. El propio presidente del comité de empresa de Seat, Matías Carnero, reconocía la pasada semana que "necesitamos un presidente con funciones plenas para defender a Seat en la próxima negociación de la ronda de planificación de producciones y modelos del grupo". El escenario post-pandemia (o en pandemia hasta que no llegue la vacuna) no será fácil para Griffiths, aunque su perfil estratégico de ventas y menos de financiero es posible que sea lo que necesita la marca ahora mismo.

Los próximos lanzamientos serán clave para Seat. El León híbrido enchufable, el Cupra Formentor, las nuevas versiones de Ateca y Tarraco, así como las primeras luces del Cupra El-Born, capitalizarán los primeros momentos de una gestión que la plantilla y el sector esperan sea duradera.