El Premio Nobel de la Paz bangladeshí Mohamed Yunus y nueve directores del Grameen Bank, el banco concesionario de microcréditos que Yunus fundó en el 2000, han presentado este jueves ante el Tribunal Superior de Dacca sendas demandas contra la orden del Banco de Bangladesh de destituirlo como director ejecutivo de la entidad. Por su parte, el Gobierno de Bangladés ha defendido su decisión ante la comunidad internacional.

El Tribunal Superior de Dacca celebra una audiencia conjunta para escuchar las alegaciones de Yunus y sus colegas, según fuentes del Grameen Bank, que han subrayado que el Banco de Bangladesh "no tiene la autoridad para destituir". Estas fuentes han insistido, como ayer ya hizo Yunus, que el caso "tiene una motivación política". El Nobel de la Paz aseguró que la orden del banco central obedece a una represalia.

CAMPAÑA DE DESPRESTIGIO

Yunus, galardonado con el Príncipe de Asturias de la Concordia en 1998 y con el Nobel de la Paz en el 2006, ha sido sometido en los últimos tres meses a una campaña de desprestigio liderada por la primera ministra de Bangladesh, Sheikh Hasina, que llegó a calificar a Yunus de "chupasangres". La campaña comenzó tras la emisión en noviembre del 2010 de un documental en la televisión noruega que denunciaba un supuesto trasvase ilegal de fondos entre entidades del Grupo Grameen.

La escena política bangladeshí está dominada desde hace dos décadas por Hasina y la ahora opositora Khaleda Zia, dos herederas de dinastías políticas que vieron con malos ojos que Yunus intentara abrir una tercera vía con la formación de un partido antes de las elecciones del 2008.

El ministro de Finanzas del país surasiático, Abdul Muhith, ha comparecido, por su parte, ante representantes de la comunidad diplomática y de instituciones multilaterales como el Fondo Monetario Internacional o el Banco Mundial para defender la decisión del Banco de Bangladesh. El ministro ha alegado que el economista no había dejado otra posibilidad.