El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, exigió ayer a la presidencia luxemburguesa de la Unión Europea (UE) que España mantenga su estatuto de "país claramente receptor de fondos" comunitarios durante el periodo presupuestario 2007-2013, a pesar de la integración de los países del Este. Zapatero se reunió durante más de dos horas con el presidente semestral de la UE, el primer ministro luxemburgués Jean-Claude Juncker, para transmitirle las reivindicaciones españolas de cara a la crucial negociación de la cumbre del 16 y 17 de junio.

Zapatero dijo tras la reunión que la última oferta de compromiso de la presidencia de la UE es "insuficiente para España", aunque estimó que representa "un avance" respecto al proyecto de la Comisión Europea.

"La última oferta de la presidencia luxemburguesa es mejor que la de la Comisión Europea", indicó Zapatero. El Gobierno valora positivamente la propuesta de prórroga durante dos años del fondo de cohesión, aunque el periodo es demasiado corto y la cantidad aún está por precisar. Zapatero también reclamó más fondos para regiones que dejan de ser pobres por el efecto estadístico de la ampliación o por méritos propios y una mayor dotación para el desarrollo rural y la pesca.

SACRIFICIO ESPAÑOL "Es necesaria una respuesta equilibrada a las circunstancias que tiene España como consecuencia de la ampliación", dijo. España, según el proyecto de nuevo marco presupuestario, deberá asumir un sacrificio tres veces mayor al de Alemania y más del doble del de Francia, Gran Bretaña y Holanda. España, explicó Zapatero, está dispuesta a hacer un esfuerzo de solidaridad "notable" en favor de los nuevos estados miembros mucho más pobres, pero con la condición de que ese sacrificio español sea "razonable, equilibrado y progresivo".

España, prosiguió Zapatero, tiene que continuar como "un país claramente receptor de fondos europeos más allá del incremento de renta provocado por la ampliación de la UE".

El Gobierno rechaza convertirse en contribuyente neto a partir del 2013, como ocurriría si se aprueba el proyecto de marco presupuestario. Esa propuesta implicaría que la contribución anual de España sería 167 millones de euros superior al total de ayudas que recibiría de la UE por todos los conceptos.

CONTRA ALEMANIA Y FRANCIA El presupuesto de la UE a partir del 2007 "debe estar por encima del 1% de la renta europea", insistió Zapatero, desmarcándose de la exigencia de sus dos principales aliados, Alemania y Francia.

Zapatero evitó pronunciarse sobre la respuesta de Juncker a sus demandas: "Tengo mucha confianza en Juncker y en su capacidad de aunar voluntades".