El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha pronosticado que la economía española sufrirá un "mayor debilitamiento" en los próximos meses, pero ha descartado que vaya a registrarse un "estancamiento duradero y menos aún una recesión".

En su comparecencia extraordinaria en el pleno del Congreso para analizar la situación económica, Zapatero ha afirmado que en solo seis meses la economía española ha pasado de crecer un 3,5%, en el último trimestre del 2007, a un 2% en este momento, mientras que en tasas intertrimestrales, el segundo trimestre registrará tasas "más débiles" que el aumento del 0,3% del primer trimestre.

El jefe del Ejecutivo ha admitido que el ajuste del sector de la construcción ha sido "más rápido e intenso" de lo previsto y con un "alto coste" en términos de empleo --desde septiembre, un tercio del paro ha afectado a la construcción-- y que los últimos datos de viviendas construidas hacen prever que "la destrucción de empleo continuará en este sector en los próximos meses".

Coyuntura "claramente adversa"

"La afiliación ha crecido, el paro se ha incrementado y la inflación anticipada se sitúa en el 5,1%. Son datos que reflejan una coyuntura económica claramente adversa y en un plazo relativamente breve, lo que acentúa la situación de deterioro", ha añadido Zapatero.

El jefe del Ejecutivo ha señalado que la desaparición del superávit no debe llevar al "dramatismo", dado que, en su opinión, es "lógico" que se reduzca porque la política fiscal debe contribuir a estabilizar la economía dentro de una "actitud general de rigor". "Hemos ahorrado cuando debíamos y ahora tenemos margen para afrontar las dificultades", ha dicho.

Mantenimiento de las políticas sociales

Zapatero ha añadido que el Gobierno es consciente de que muchos ciudadanos sienten "inquietud y preocupación" por el futuro, pero les ha garantizado que el Ejecutivo asume su responsabilidad con los medios de los que dispone para hacer frente a este "frenazo" económico.

"La economía está atravesando un periodo de serias dificultades, pero nunca antes lo había afrontado en mejores condiciones de partida", ha subrayado. El presidente se ha mostrado convencido de que el Gobierno sabrá "hacer recuperar la economía y el empleo", y que esto se conseguirá "manteniendo siempre las políticas sociales".