Por la conciliación de la vida laboral y familiar pero también el éxito educativo. Son los dos objetivos que persigue el programa Aula-Dos, una iniciativa experimental de la Junta de Extremadura para adelantar a los dos años la escolarización de los niños en la región. Este año ya ha funcionado como experiencia piloto y se mantendrá de cara al curso 2019/2020 con una oferta de 180 plazas en diez centros públicos de Badajoz, Cáceres, Mérida, Plasencia, Don Benito, Villanueva de la Serena y Navalmoral de la Mata.
El Diario Oficial de Extremadura (DOE) publicó ayer la orden por la que se regula la implantación de este programa para el próximo curso. Según confirmó la Consejería de Educación y Empleo, el número de plazas se mantiene respecto al año anterior porque no se llegó a cubrir toda la oferta (se recibieron 126 solicitudes), pero en esta ocasión sí se ha introducido un cambio normativo para que en el futuro estas aulas puedan implantarse en cualquier colegio donde haya demanda. Así, mientras que el año pasado la admisión de alumnos siguió el procedimiento de las guarderías públicas, ahora seguirá el de los centros de Infantil y Primaria, que se inicia en abril.
La orden publicada en el DOE recoge que las aulas para niños de dos años funcionarán en horario de 7.30 a 15.30 horas, siendo el periodo lectivo mínimo obligatorio de 20 horas semanales. La ratio fijada es de 18 niños por clase (dos de ellas reservadas al alumnado afectado por posibles urgencias de exclusión social y para niños con necesidades educativas especiales) y cada unidad será atendida por dos Técnicos de Educación Infantil (TEI) con el mismo perfil que se exige para las guarderías.
El pograma Aula-Dos ofrece además a los padres un servicio de comedor «adaptado a las necesidades propias de esta edad», que también sería atendido por los propios TEI. El objetivo de todo ello, explica la norma, es «facilitar la conciliación de la vida personal, familiar y profesional», pero también «hacer posible y efectivo el derecho a una educación temprana». Y es que según se recoge en el texto, la escolarización temprana del alumnado de cero a tres años «tiene probado un alto impacto en los resultados académicos de los niños» porque contribuye a prevenir las dificultades de aprendizaje. Además, «contrarresta las desigualdades educativas y constituye la inversión en educación más redistributiva».
ANTECEDENTES / Cabe recordar que adelantar la escolarización de los niños extremeños a los dos años fue uno de los anuncios del presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, en su último Debate sobre el Estado de la Región. El pasado septiembre comenzó a funcionar en las principales ciudades de la región y Extremadura se colocó así del lado de regiones como País Vasco o Cantabria. Es cierto que en los dos centros de Mérida ya se ofrecía esta posibilidad con anterioridad, pero no de forma gratuita como ahora.
Para las plazas ofertadas el año pasado, la Junta recibió un total de 126 solicitudes. Los padres mostraron un interés desigual por la iniciativa en función de las zonas y así, hubo colegios con más demanda que oferta (el Santa Marina de Badajoz, con 38 preinscripciones para las 18 plazas ofertadas) y otros en los que sobraron plazas (el colegio Manuel Pacheco, también de Badajoz, con solo cinco solicitudes).
De igual forma, recibieron más peticiones que plazas el colegio Maximiliano Macías de Mérida (20), el Cervantes de Cáceres (19), el Sierra de Gredos de Navalmoral de la Mata (17), y el Donoso Cortés de Don Benito (16). Como el centro pacense Manuel Pacheco, tampoco cumplieron el cupo los colegios Pizarro de Cáceres (14), Ramón y Cajal de Plasencia (8), Cruz del Río de Villanueva de la Serena (9) y Pablo Neruda de Mérida (6).
La idea de la Junta de Extremadura es ir implantando poco a poco esta oferta educativa y por ello, además del cambio normativo de este año, los nuevos centros que se construirán en Cerro Gordo (Badajoz), Huertas de la Isla (Plasencia) y el nuevo colegio de San Roque (Almendralejo) cuentan en sus proyectos con un aula de estas características.
