El progresivo engrosamiento de la lista negra de víctimas de violencia sexista --ya son 17 en lo que va de año-- ha pasado a ser uno de los temas prioritarios de esta campaña electoral. Cuatro mujeres murieron el pasado martes a manos de sus parejas o exparejas, y lo inesperado del suceso ha obligado a las principales formaciones políticas a reaccionar al respecto.

El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, reconoció ayer que, pese a ser "necesaria", la ley contra la violencia de género no es suficiente para acabar con el maltrato, por lo que el Gobierno profundizará "en todas las políticas, medidas y compromisos necesarios para perseguir esta lacra". Caldera avanzó que, en caso de ganar las elecciones del 9 de marzo, una de las primeras iniciativas del nuevo Ejecutivo será poner en marcha campañas de sensibilización "permanentes y accesibles, parecidas a las de Tráfico, que analicen el fenómeno en todas sus dimensiones". Unas campañas, precisó, que se centrarán en "el rechazo absoluto al agresor" y en la defensa de los derechos de las mujeres.

TRABAJO CONJUNTO Caldera se refirió también a algo que ya adelantó José Luis Rodríguez Zapatero el miércoles: la intención de convocar una conferencia de presidentes autonómicos para abordar el problema de manera monográfica y desarrollar el Plan Nacional de Sensibilización y Prevención. La iniciativa fue respaldada ayer por los presidentes de Aragón, Castilla-La Mancha, Galicia y Cataluña, del PSOE, mientras que los presidentes de la Comunidad de Madrid, La Rioja y la Comunidad Valenciana, del PP, tildaron la convocatoria de "oportunista" y dudaron de sus resultados.

Una opinión compartida por el presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, que calificó irónicamente la propuesta de "genialidad" y recordó que, pese a que su partido votó la ley contra la violencia machista, advirtieron de que no bastaba "con leyes para salir en los telediarios", ya que "hay que gobernar, tomar decisiones".

CONDENA A UN CONCEJAL Y el martes, cuando la violencia machista se cebó en cuatro mujeres, el concejal del PP de Aldaia (Valencia) Leopoldo Rodríguez Murgui dimitía tras ratificar la Audiencia Provincial la sentencia de seis meses de prisión e inhabilitación de cargo público por maltratar a su exmujer. La portavoz del PP de Aldaia, Carmen Jávega, aceptó ayer su renuncia al cargo, aunque días antes se negó a pedirle la dimisión porque "en Aldaia nadie se cree que la agresión sea verdad". La alcaldesa socialista, Empar Navarro, recordó que "el tema apareció antes de la campaña", pero "el Partido Popular lo puso en la lista y le ha dado cobertura", informa Ignasi Muñoz.