Una primera diferencia: el PSOE mantendrá la asignatura de Educación para la Ciudadanía y el PP la suprimirá. Otra: Mariano Rajoy impulsará una ley para "garantizar" la enseñanza en castellano en toda España mientras que Zapatero considera que lo único que pretende el PP es politizar la convivencia lingüística en las autonomías bilingües. El resto de diferencias son menos evidentes. Tanto socialistas como populares se comprometen a reforzar el aprendizaje de idiomas extranjeros. En el caso del PP se apuesta claramente por el inglés. Los preocupantes datos del último Informe Pisa han situado la educación en el centro del debate político. Rodríguez Zapatero ha anunciado que, si gana, convocará a todos los presidentes autonómicos para consensuar una estrategia que permita mejorar las estadísticas del alumnado español. El líder del PSOE se compromete a que la mitad de los alumnos de secundaria y un 30% de los de educación superior tengan beca.

Tanto Zapatero como Rajoy prometen luchar contra el fracaso escolar y conseguir un descenso de las preocupantes tasas de abandono escolar hasta situarlo por debajo del 10%. Además, Mariano Rajoy se ha propuesto que, en ocho años, un 90% de los alumnos acaben la educación secundaria.