«Al saber que se tenían que repetir las elecciones, mi primer impulso fue decidir que no volvería a ir a votar, porque parece que estamos de cachondeo, que nos están tomando el pelo, que ellos no lo afrontan de manera seria. Si hubiese habido una plataforma que uniera a todo el mundo para no acudir de nuevo a las urnas, seguramente yo la hubiera apoyado y me hubiese apuntado, porque esto es verdaderamente una vergüenza. Vamos a llegar, otra vez, a los mismo resultados. ¿Y ahora qué? ¿ahora se van a poner de acuerdo ya o tampoco?». Es la percepción de José Cortés, que tiene 46 años, es trabajador social y vive en Zafra.

«No podemos estar sin gobierno. Y otra vez nos vamos a encontrar con la misma situación. De manera que al final el sentimiento que te queda es cansancio y hastío», insiste Cortés.

No obstante, a pesar de su indignación, compartida por otros muchos, visitará mañana las urnas para ejercer su derecho democrático al voto, aunque «sin ilusión ninguna», subraya.