El exconcejal del PP en el Ayuntamiento de Palma Javier Rodrigo de Santos fue condenado ayer a 13 años y seis meses de cárcel y a 32 meses de pago de multa por varios delitos de abusos sexuales a menores y por otro contra la salud pública. El exedil suma ya más de 15 años de prisión, pues en septiembre fue sentenciado a dos años de cárcel y cuatro de inhabilitación por pagar con una tarjeta del consistorio en clubs de alterne masculinos.

El juez cree probado que, en el 2005, compró hachís para consumirlo con un menor y contrató a una prostituta para ver cómo el chico perdía la virginidad. En el 2007, un joven se quedó a dormir en casa de De Santos, donde le hizo tocamientos y le invitó a inhalar una sustancia desconocida. Días más tarde, otro menor que pernoctó en su piso se despertó porque le estaba haciendo una felación.