El exnúmero dos de la policía Pedro Díaz-Pintado admitió ayer, ante la comisión de investigación parlamentaria del 11 de marzo, que un subordinado suyo se equivocó cuando le comunicó que el explosivo empleado en la matanza era Titadyne, material usado por la banda terrorista ETA desde el 2000. A pesar de ello, el exministro del Interior Angel Acebes insistió en la autoría de ETA tras conocer ese error. El exmando policial desveló que las dos vías de investigación comenzaron el 11 de marzo. "No dimos prioridad a ninguna", afirmó.

Díaz-Pintado asumió que, en un primer momento, atribuyó la autoría de la masacre a ETA "por deformación profesional". Valoró que la Guardia Civil había frustrado la intención de esa banda terrorista de colocar 12 bombas en la estación de Baqueira Beret a finales del 2003.

LA LLAMADA El exmando policial contó que el exsecretario de Estado Ignacio Asterloa preguntó, en una reunión celebrada al mediodía del mismo 11 de marzo, sobre el explosivo empleado en la masacre de Madrid. "No teníamos ningún dato fiable", explicó a los miembros de la comisión. Por ello, llamó al comisario general de seguridad ciudadana, Santiago Cuadro.

"Me contesta con cierta acritud que no tengamos tanta prisa", agregó. Poco después, Cuadro le llamó y le dijo que era Titadyne con cordón detonante. "Le pregunto: ´¿Seguro?´ Me dice: ´Seguro´". El exjefe policial comunicó ese dato en el encuentro. Sin embargo, a las cinco de la tarde del 11-M, Cuadro le dice que el explosivo es dinamita.

INFORMACION AL GOBIERNO El exmando policial comunicó este hecho al exministro del Interior Angel Acebes en otra reunión celebrada a las seis de la tarde del 11-M. No obstante, el exministro insistió en que el explosivo empleado en la masacre era el utilizado habitualmente por ETA, en una rueda de prensa celebrada esa noche. No obstante, para Díaz-Pintado ese dato no era determinante. "Me parece una equivocación que se diga Tidatyne igual a ETA, no Titadyne ya no es ETA", apostilló.

Paralelamente, comenzó la investigación con las pruebas halladas en la furgoneta y se "abre otra vía". A partir de ese momento, la policía no prima la investigación sobre la banda terrorista ETA. "Se estaba investigando en las dos direcciones", manifestó. Aunque admitió que la pista etarra se estancó desde el primer momento. Sin embargo, la línea del terrorismo islamista fue cobrando peso tras el hallazgo de un móvil en la mochila que aparece en la madrugada del 12 en una comisaría.

Al día siguiente, sobre las 10 de la mañana, le informan de que se iba a detener a dos indios que vendieron las tarjetas de los móviles. El exsecretario de Estado es informado de esa operación, pero se le pide discreción. "No queremos transmitirlo y pedimos prudencia. Si decimos: llevamos la investigación y no sabemos por dónde vamos, pero ETA, no, se nos pueden ir corriendo todos los que están detrás".

DISCREPANCIAS No obstante, el exmando policial discrepó de que en la mañana del sábado, el exministro Acebes afirmara con rotundidad que la banda ETA era la autora. "En ese momento, para mí, que tengo datos, no", dice. Y añade: "Se le pide que no informara del operativo que se iba a desarrollar".