El portavoz del grupo socialista en el Congreso, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha hecho llegar a Josep Antoni Duran Lleida, jefe de filas de CiU en Madrid, su interés en mantener un encuentro en los próximos días para estrechar relaciones, según fuentes del grupo parlamentario catalán.
Por mucho que en el partido se debata la conveniencia de un acuerdo estable con ERC e IU, el PSOE, pensando en el futuro, no quiere dejar de lado a CiU. Y los nacionalistas también están dispuestos a cuidar esas relaciones.
Sin embargo, PSOE y CiU son conscientes de que una colaboración estable en Madrid es una quimera mientras no cambie el escenario en Cataluña. Y también coinciden en que ese cambio no se producirá esta legislatura, sino que habrá que esperar a las próximas autonómicas, en otoño del 2007.
Pensando que, para entonces, la aritmética parlamentaria puede propiciar un pacto PSC-CiU, los socialistas han decidido "invertir a futuros", aunque por ahora sólo están en la fase de "hacer manitas", explican gráficamente dirigentes de la federación.
Los socialistas, además, temen la factura electoral del acuerdo con ERC.
