UN POLICIA , de los tres acusados por el PP de detener ilegalmente a dos de sus militantes tras una manifestación en la que el exministro de Defensa José Bono fue increpado, negó ayer esta acusación. Afirmó en el juicio que los simpatizantes sólo fueron llamados a declarar como imputados y no por agredir a Bono, sino por otras "figuras delictivas", como atentar e injuriar al entonces ministro.