La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha anunciado hoy que los miembros de su Gobierno utilizarán el transporte público para sus desplazamientos, aunque habrá una flota de coches de incidencias de gama media baja para cuando necesiten desplazarse a lugares lejanos.
En declaraciones a la cadena Cope, Esperanza Aguirre desgranó estas medidas de ahorro del gobierno regional para combatir la crisis. Según la presidenta regional, los consejeros de la Comunidad de Madrid en la actualidad ya "van en muchísimas ocasiones en Metro", pero a partir de ahora, "cuando un consejero tenga que ir a un municipio de la Comunidad de Madrid que no tenga transporte público, evidentemente le llevarán, pero siempre que se pueda, irán en transporte público los consejeros, los viceconsejeros, los directores generales, todos los miembros del Gobierno".
La presidenta aseguró que ya ha reducido "coches oficiales, nada menos que 60", pero señaló que va a reducir aún más el número, como ya ha anunciado, y que está en licitación "un nuevo concurso para el renting de los coches". "Vamos a cambiar la gama, de ninguna manera va a ser gama alta, sino que va a ser una gama media baja, y no van a ser coches a disposición de los cargos políticos, sino coches de incidencias", especificó Aguirre.
Argumentó que "los ciudadanos quieren ver la austeridad en sus representantes y eso es lo que tendría que hacer el Gobierno de la Nación como primer paso".
NO CONGELAR LAS PENSIONES
El PP ha cuantificado en 3.000 millones de euros lo que se ahorraría el Gobierno si redujera su estructura y el número de altos cargos a la mitad de lo que hay ahora, y por ello, pedirá mañana al Ejecutivo que acepte esta propuesta antes que congelar las pensiones, durante el debate para convalidar o derogar el decreto-ley con las nuevas medidas de recorte público.
El Ejecutivo prevé aprobar el decreto solo con el voto a favor de los diputados socialistas, ya que sus supuestos aliados en el citado debate, CiU, PNV y CC, están más cerca de la abstención que del respaldo. El PP pone como condición para no votar en contra la supresión de la congelación de las pensiones.
El principal partido de la oposición propone la reducción al 50% del personal eventural de la Administración General del Estado y en un 25% del número de altos cargos.
