Castro es un dictador. Las penas de muerte aplicadas a tres secuestradores de un barco son una barbaridad, que recuerdan demasiado a lo sucedido en España en la agonía del franquismo. Dicho esto, es una vergüenza la manipulación de la derecha, tanto española como cubana, para ajustarle las cuentas al PSOE e IU por su oposición a la guerra de Irak. ¿A qué viene, si no, interpelar a Rodríguez Zapatero y a Llamazares para que se manifiesten contra Castro , echándoles en cara que protestaron contra la guerra? Una cosa es movilizarte contra tu Gobierno por la política que lleva a cabo y otra muy distinta hacerlo contra un dictador extranjero.