No se había visto una catarsis semejante en la Costa del Sol desde la inaguración de Cantora Kopas, el bar que Isabel Pantoja abrió el verano pasado en la ciudad costera de Fuengirola. La manifestación de apoyo a Julián Muñoz, celebrada anoche en la plaza del Ayuntamiento de Marbella, fue un intenso baño de masas y de sudor, pero arrojó algunas dudas sobre el respaldo popular con el que cuenta el alcalde.

No había muchos pero, eso sí, eran de lo más efusivos. Otro gallo hubiera cantado si a la tonadillera le hubiera dado por salir, pero prefirió quedarse dentro del consistorio, para no birlarle ni un ápice de atención mediática a su novio.

REPERTORIO DE INSULTOS

Una multitud de apenas 500 personas --contando fans de la pareja Muñoz-Pantoja, curiosos, transeúntes y turistas-- vibraron con el alcalde, insultaron a Jesús Gil ("¡perro traidor!"), a Isabel García Marcos ("¡cósete esos labios y deja de mentir!") y a Carlos Fernández ("¡golfo político!"). También bailaron sevillanas.

Fue una pena que el eslogan propuesto por el diario La Tribuna no calara. Así que en vez de: "Esto no es una moción censura, sino un guión de Santiago Segura", la frase recomendada por el diario, la muchedumbre prefirió otras como: "Alcalde sí, Al Capone, no", o "Marbella no se vende". Con todo, la consigna más simbólica fue: "Vivan tus cojones", la misma frase que le dijo Pantoja a Muñoz en los camerinos nada más terminar, la semana pasada, el show de Salsa rosa .