El ministro de Defensa, José Antonio Alonso, realizó ayer una ronda de contactos telefónicos con Mariano Rajoy (PP), Josep Antoni Duran Lleida (CiU) y Joan Puigcercós (ERC), tras la que obtuvo el apoyo verbal de las principales fuerzas políticas para aumentar las tropas en Afganistán, sin esperar a su comparecencia formal en el Congreso, prevista para el día 9 de mayo.

Alonso también habló con Llamazares, quien le negó su apoyo por coherencia con la posición contraria al despliegue en el país asiático que ha mantenido su grupo. Y es que, casi simultáneamente, IU-ICV vio ayer como el Congreso rechazaba su propuesta de retirada de las tropas españolas de Afganistán.

El jefe del Estado Mayor de la Defensa, Félix San Roldán, que acompaña al ministro en este viaje, junto con el jefe del Ejército de Tierra, José Antonio García González, le planteó a principios de abril un aumento de las tropas en unos 150 soldados, que se sumarían a los 570 ahora existentes. "He estudiado la propuesta y he visto sobre el terreno su necesidad objetiva", aseguró Alonso, quien dijo sentirse "impresionado" por la "ingente labor" de los soldados y tras visitar la localidad de Qalai-i-Naw.

El ministro no quiso detallar el número de soldados que compondrán el contingente de refuerzo y dijo que quiere repasarlo con los mandos, pero señaló que se necesita más capacidad de trasporte --el contingente dispone de cinco helicópteros: dos de salvamento y tres de transporte-- y más seguridad para las obras que se están realizando.

DINERO BIEN EMPLEADO El rendimiento de los recursos económicos invertidos en Afganistán es óptimo, y los tres millones de euros gastados hasta ahora por la agencia de cooperación española, que ha presupuestado hasta 10 este año, sorprendieron al ministro. Tras rendir homenaje a los 17 militares muertos, el 16 de agosto del año pasado en un accidente de helicóptero cerca de Herat, Alonso visitó la unidad de reconstrucción de Qalai- i-Naw, la central eléctrica que ya proporciona luz a esta localidad de 16.000 habitantes, y un puente de la carretera a Herat.

Ante el gobernador y los notables locales Alonso reforzó el compromiso de España con la reconstrucción de Afganistán. Luego, en su primer discurso a las tropas, el nuevo ministro dijo estar conmovido por el trabajo que realizan los soldados. "Yo os prometo, como ministro de Defensa, que me esforzaré en la mejora constante de nuestros ejércitos", señaló, antes de agradecer los "riesgos" que asumen.

Aunque algunos oficiales informaron a este diario del incremento de los ataques --en los cuatro meses de este año se han producido más ataques suicidas en Afganistán que en todo el año anterior-- el ministro dijo no tener constancia más que del que se registró el día 14 de abril contra una patrulla de legionarios.

Eso sí, quiso dejar claro que la misión se limitará a lo fijado por la ONU y no incrementará riesgos. Así, España no intervendrá en la quema del opio, principal fuente de ingresos de los campesinos de este país.