Como si fuera el Bertín Osborne extremeño, en una cocina de clase media-alta (¿es ese su público?), se remanga la camisa mientras se presenta: «Soy Cayetano Polo, candidato de Ciudadanos a la presidencia de la Junta». Dice que Extremadura necesita un cambio y, a continuación, coge una naranja, la corta en dos y exprime una de las partes mientras habla de reformar la Administración pública.

Aprieta bien la fruta contra el aparato, tanto que con solo una mitad saca zumo para casi un vaso entero. ¿Es la mejor metáfora de su partido?

Son apenas 30 segundos de lo que parece una promoción del programa televisivo Mi casa es la tuya, por donde precisamente pasó su jefe Albert Rivera.

Corre el rumor de que el exprimidor no estaba enchufado. ¿Es esa otra metáfora?

EN YOUTUBE / El vídeo se puede ver en el canal de Youtube de Cs Extremadura y es uno de los contenidos que están moviendo por internet. Porque la campaña se disputa en la calle, en la tele y en las redes sociales.

Cayetano juega, de alguna manera, a ser Monago en sus tiempos de Iván Redondo, al menos lo intenta. El líder de la formación naranja (explotan al máximo el adjetivo) imita al candidato popular cuando fue seducido por ese asesor que revolucionó su imagen para que fuera diferente (lo convirtió en el gran protagonista). Redondo le hizo ganar unas elecciones y perder las siguientes (ahora camina al lado de Pedro Sánchez).

Así, Ciudadanos hace una campaña muy enfocada en su número uno, ahora ya el líder indiscutible, en la que éste protagoniza escenas cotidianas. Al fin y al cabo, logró quitarse de en medio a su rival, María Victoria Domínguez (que ha caído literalmente de pie en Madrid, puesto que ya es diputada nacional por Cáceres), y convertirse en el mandamás del partido. Incluso a pesar del duro desencuentro con Francisco Piñero, con quien se recorrió los pueblos de la región para lograr reunir candidaturas locales. Pero Piñero se marchó dejando una carta en la que hablaba de «traición personal»; se pasó a Vox, la ultradecha, y ahora va de número uno por Cáceres a la Asamblea de Extremadura.

El candidato naranja quiere acabar con el despilfarro, dice en el vídeo. Suena a aquel «se acabó la fiesta» de José Antonio Monago cuando cogió las riendas de la comunidad en 2011 y pidió a las consejerías un recorte del gasto público.

EL MÁXIMO JUGO / Pero sobre todo el líder de Cs quiere sacar el máximo jugo al escenario que tiene por delante. La sombra de Cataluña, Rivera e Inés Arrimada sigue siendo alargada; las elecciones generales evidenciaron la subida del partido a costa del hundimiento del PP y Cayetano dice que serán los socialistas y los populares quienes tendrán que ir a buscarlo a él para hablar de pactos: porque será el próximo presidente.

El PSOE presenta candidatura en los 399 municipios de Extremadura y cuentan con 50.000 simpatizantes; el PP tiene lista propia en 398 y 31.000 adscritos. Cs se presenta solo en 92 localidades (llega al 23,7% de la región) y suma 3.000 inscritos.

Dejando a un lado la estructura de partido y su presencia real en la comunidad, así como los resultados de la cuesta de Ágora Integral para EL PERIÓDICO EXTREMADURA, que plasman su subida pero lejos aún del PP, los de naranja (y las naranjas) van a por todas.

El vídeo de Ciudadanos termina con una lema clave: #VitaminaCayetano.

Porque lo que, a sus ojos, necesita Extremadura es vitamina C, pero con C de Cayetano.