El asesor jurídico de la Casa del Rey y conde de Fontao, José Manuel Romero, ha afirmado hoy al juez que en 2006 se dirigió a Iñaki Urdangarin para que dejara sus actividades en el Instituto Nóos con la finalidad de evitar que obtuviera rédito económico "por ser quien es".

Romero ha declarado como testigo ante el juez del caso Nóos, José Castro, durante alrededor de una hora y media después de que Urdangarin y su exsocio Diego Torres declararan en su día que realizó labores de mediación y asesoramiento al duque de Palma en Nóos y en la Fundación Deporte Cultura e Integración Social y (Fdcis).

Fuentes jurídicas consultadas por Efe han explicado que el asesor ha reconocido al juez que pidió a Urdangarin que abandonara Nóos tras enterarse en una revista y a través de una persona de sus actividades en el instituto, las cuales a su juicio no encajaban con la ética de la Casa Real.

El conde de Fontao ha añadido que con ello pretendía evitar que Urdangarin "enseñara la tarjeta" como garantía de su fiabilidad en vistas a obtener contratos públicos y privados.