La sala de Gobierno de la Audiencia Nacional concluyó ayer que la decisión del juez Eloy Velasco de dejar en libertad bajo fianza de 12.000 euros a la etarra Maite Aranalde fue "correcta", a pesar de que esta se fugó después, según informó ayer el presidente de esta sede judicial, Angel Juanes, en rueda de prensa.

Los magistrados revisaron los acuerdos adoptados por el juez desde que Francia entregó a la terrorista el pasado día 25. Un día más tarde, Velasco acordó dejarla en libertad bajo fianza porque en su contra solo existen las declaraciones de otros dos procesados y uno de ellos ha sido absuelto. Pese a ello, el magistrado admitía en su auto que existía "riesgo de fuga" por lo que fijó una fianza de 12.000 euros.

La fiscalía recurrió la decisión el viernes siguiente y solicitó al juez que ordenara a la policía que vigilase a la etarra mientras se resolvía el recurso. Pero el juez interpretó que no podía resolver esta petición sin analizar el resto del contenido del escrito del fiscal. Una decisión que, a juicio de Juanes, no ha supuesto "ninguna anomalía en el funcionamiento del juzgado". Por ello, el presidente de la Audiencia defendió el trabajo de Velasco, "guste o no guste", y la decisión de Baltasar Garzón de ordenar el lunes el ingreso en prisión de Aranalde y su busca y captura tras constatar su fuga. "Son resoluciones judiciales que responden a criterios legales", afirmó. Por ello, la Audiencia acordó que no procedía abrir una una investigación a Velasco porque la "tramitación ha sido correcta".

La polémica ha servido para que la Audiencia Nacional vaya a proponer una reforma al Gobierno para simplificar los trá- mites de la extradición cuando asuma la presidencia de la UE el primer semestre del 2010. Una propuesta que no será atendida por el Gobierno, que opina que la euroorden funciona bien.