Una petición sin precedentes. La Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), que preside Francisco José Alcaraz, quiere que España deje de formar parte de organismos internacionales como la ONU y la Unión Europea. Para ello, ha enviado una carta a las embajadas extranjeras en España en la que solicita que se presione al Gobierno español, porque considera "que se está mostrando incapaz de garantizar el Estado de derecho, sobre todo en el País Vasco".

La AVT responde así al comunicado que ETA hizo público el pasado jueves, en el que pidió mediación internacional en el hipotético caso de que se produjera una negociación con el Gobierno. Alcaraz se muestra de acuerdo con los terroristas en que la comunidad internacional debe implicarse. De esta forma, exige que se envíen observadores al País Vasco y que "comprueben in situ hasta qué punto están restringidas las libertades, pero sólo para aquellos que no comparten la obsesión nacionalista".

Esta asociación opina que el país vive "un estado de excepción" y que el presidente ha impuesto "un recorte de libertades".

El Gobierno no tardó en reaccionar a la iniciativa de Alcaraz y calificó esta misiva de "intolerable y desleal", tanto por el tono empleado como por su contenido.