José María Aznar admitió ayer que no está plenamente satisfecho con los índices de inseguridad ciudadana. En respuesta a una pregunta parlamentaria del líder socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, el presidente destacó que en el primer semestre de este año los delitos disminuyeron un 7,2% respecto al 2002, pero reconoció que "es necesario seguir mejorando" y por ello, dijo, se ha decidido aumentar las plantillas de la policía y de la Guardia Civil, además de aprobar reformas legales contra la delincuencia.
Zapatero se había interesado por el notable incremento de la inseguridad ciudadana, con cinco homicidios al día y un millón más de delitos desde que gobierna el PP. El líder del PSOE pidió una subida presupuestaria del 15% para recuperar las plantillas policiales y propuso reformar la ley de fuerzas de seguridad del Estado. Pero Aznar aprovechó para atribuirle al PSOE la intención de "suprimir la Guardia Civil". La interpretación del presidente de la propuesta socialista de unificar el mando de la policía y la Guardia Civil provocó una exclamación en la oposición. Aznar insistió: "La unificación supone la supresión de la Guardia Civil y es la mayor de todas las ligerezas que he escuchado a los socialistas".
