El presidente del Gobierno, José María Aznar, y el primer ministro británico, Tony Blair, están "absolutamente de acuerdo" en la política sobre el futuro de Irak, indicaron fuentes del Gobierno tras el encuentro que ambos mandatarios mantuvieron ayer en Chequers, la residencia de campo de los primeros ministros del Reino Unido.

Blair y Aznar celebraron este encuentro, de cerca de dos horas y que fue calificado de privado e informal, al día siguiente de que el líder británico fuera a una reunión en Berlín con el presidente francés, Jacques Chirac, y el canciller alemán Gerhard Schröder, de la que fue excluido Aznar.

En la cumbre de Berlín no hubo acuerdo sobre la política iraquí. Franceses y alemanes reclaman un mayor protagonismo de la ONU y un calendario para traspasar en poco tiempo el poder a las autoridades del país. Blair prefiere seguir dejando la iniciativa a EEUU. Esta cuestión será discutida esta semana en la ONU.

LA INICIATIVA ESPAÑOLA

Ni Aznar ni Blair comparecieron ante la prensa tras la reunión, por lo que toda referencia sobre lo tratado procede de fuentes indirectas, que ofrecieron muy pocos detalles. Alfredo Timermans, secretario de Estado de Comunicación de la Moncloa, aseguró a los periodistas que en el encuentro no se abordó la iniciativa del presidente español, anunciada el pasado miércoles, de desplegar en Irak una fuerza multinacional bajo "mando homogéneo" que tenga a la OTAN como modelo de referencia. Esta iniciativa margina a las Naciones Unidas a tareas civiles y de reconstrucción.

Aznar --que ayer llevaba el brazo derecho vendado a consecuencia de una tendinitis-- logró, según fuentes de la Moncloa, que Blair se mantenga neutral en el contencioso que mantiene España con otros países europeos, particularmente Francia y Alemania, en relación al borrador de la Constitución de la Unión Europea. La reforma, tal como está planteada, hace perder peso a España en las instituciones comunitarias. Madrid reclama, por ello, que se respete el reparto pactado en el Tratado de Niza.

RECTIFICACION DEL ´PREMIER´

Blair, según las mismas fuentes, aceptó no inmiscuirse en la discusión entre las partes enfrentadas, ya que es una disputa que no atañe al Reino Unido, a pesar de que el pasado sábado había dado su apoyo a la negativa de París y Berlín a alterar el actual borrador de Constitución europea.

El presidente español reiteró ante su colega británico su oposición a que se flexibilicen los rigores del pacto de estabilidad, que ni alemanes ni franceses se ven capaces de cumplir por su elevado déficit público. En Berlín, Blair se había mostrado comprensivo con las peticiones de flexibilidad.

Aznar y el primer ministro abordaron también la crisis en Oriente Próximo y la próxima conferencia de donantes de Irak, que se celebrará en Madrid. Tras la reunión, Aznar emprendió viaje a Nueva York.