El expresidente del Gobierno José María Aznar ha respondido hoy a los insultos y abucheos recibidos por varios jóvenes durante la conferencia que ha ofrecido en la Universidad de Oviedo con la frase: "Hay algunos que parecen empeñados en demostrar que no pueden vivir sin mí".

Aznar, que ha impartido hoy una conferencia sobre la crisis económica en la Facultad de Económicas de la Universidad de Oviedo, ha tenido que entrar por la puerta de atrás del edificio para no coincidir con una veintena de jóvenes que lo increpaban al grito de "fascista", "asesino" y "terrorista". El exdirigente ha replicado a los insultos y abucheos con un gesto despectivo con el dedo corazón.

Acusaciones de terrorista

Este grupo de manifestantes se había dado cita en las inmediaciones del salón de actos, donde iba a tener lugar la conferencia, alrededor de las doce. Portaban pancartas y coreaban consignas como "Aznar fascista, tú eres el terrorista", "Fuera los fascistas de la universidad", "Aznar al talego como Vera y Barrionuevo", "No a la guerra" y "PSOE y PP la misma mierda es".

Los miembros de seguridad y de la organización han conseguido impedir el paso a los miembros de la protesta, que se han quedado en la zona de las escaleras, con sus cánticos, flanqueados por efectivos de seguridad privada y por la organizadores del evento. Finalmente, el expresidente ha entrado en el salón de actos por una puerta trasera, acompañado de líderes asturianos del PP, de forma que han evitado el contacto visual con los miembros de la protesta.

Los manifestantes, bien organizados

Así las cosas, y entre los aplausos de los asistentes a un salón de actos que se encontraba absolutamente lleno, ha comenzado el acto, con 15 minutos de retraso. A las 12.45 Aznar comenzaba a hablar. Sin embargo, los manifestantes se habían organizado bien y algunos estaban en el interior, como si estuvieran interesados en la conferencia, que era abierta al público. De esta forma, no ha tardado en llegar la primera interrupción.

Unos jóvenes han interrumpido el discurso de Aznar a las 12.52 horas portando carteles de papel y al grito de "fascista". Los asistentes al acto, organizado por Nuevas Generaciones, les abucheaban mientras eran expulsados del recinto por miembros de la organización y efectivos de seguridad privada. En el exterior, continuaba el grupo inicial, con los mismos cánticos, recibiendo con aplausos a los expulsados.

Mientras, Aznar aguantaba en silencio, para retomar la palabra. Ha sido en ese momento cuando ha hecho la única referencia a los manifestantes de la mañana. "Bueno, no pasa nada", ha dicho, quitando importancia, y recibiendo aplausos, al tiempo que le coreaban "presidente, presidente". "Hay algunos que parecen empeñados en demostrar que no pueden vivir sin mí", ha señalado, al tiempo que recibía otra gran ovación.

Pugna dialéctica

Sin embargo, el capítulo de las protestas no ha terminado ahí y el expresidente del Gobierno ha sido interrumpido en cuatro ocasiones distintas mientras hablaba. Eran jóvenes que se levantaban de forma sorpresiva en distintos lugares y que gritaban "¡criminal!", "¡cabrón!" o "¡mentiroso!".

La escena ha vuelto a ser la misma. Los jóvenes eran desalojados por asistentes al acto, miembros de la organización y personal de seguridad entre abucheos y algún grito de "¡rojos!". Entre tanto, y mientras Aznar hablaban, intentaban detectar a posibles infiltrados.

Al finalizar la intervención de Aznar, que ha durado 45 minutos, este se ha retirado rápidamente acompañado de los organizadores. Esta vez sí ha salido por la puerta principal y los manifestantes han podido verle de lejos. Han continuado gritando e insultándole. Una vez que Aznar ha desaparecido de escena, los asistentes al acto, partidarios del expresidente se han enfrentado verbalmente con el grupo de manifestantes.