José María Aznar remitió ayer un escrito al director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Alberto Saiz, en el que asegura que no está "en posesión material" de documentos de este centro relativos a los atentados del 11 de marzo, en contra de lo que había afirmado el día 16 en declaraciones en Colombia.

El responsable de los servicios secretos había aprovechado su comparecencia en la comisión del 11-M, el día 19, para pedir a Aznar que devolviera los informes secretos que había reconocido guardar.

REPROCHES A SAIZ En su carta, Aznar reprocha a Saiz que "se presuma arbitrariamente que se estén produciendo irregularidades" relativas a la información que conoció en razón de su cargo. Además, se queja de que el director del CNI no hubiera apuntado qué obligaciones legales concretas considera que se habían presuntamente incumplido, que no realizara su petición dentro de "un procedimiento reglado" y que no hubiera dirigido también su requerimiento a "otras autoridades que hayan tenido acceso a documentación clasificada".

Mientras, Mariano Rajoy acusó a Exteriores de haber filtrado la contratación de un lobi norteamericano para que gestionase la concesión de la medalla del Congreso de EEUU a Aznar. El líder del PP dijo que el Gobierno tomó esa decisión para ocultar que al PSOE "le va rematadamente mal" la comisión del 11-M.

ELOGIO DE ´EL EGIPCIO´ Por otra parte, ayer se difundió una conversación entre Rabei Osman el Sayed, Mohamed El Egipcio, y dos hombres grabada el 5 de junio en la que el presunto cerebro del 11-M aseguraba que "Madrid es una lección para Europa, por alejarse de EEUU" y haber abandonado Irak.

Sobre esta última medida, el Gobierno mostró ayer su "firme rechazo" a la reprobación del ministro de Exteriores de Australia, Alexander Downer, que criticó a España por retirar las tropas.