La ministra de Empleo, Fátima Báñez, ha asegurado hoy que la reforma de las jubilaciones anticipada y parcial, aprobada por decreto ley en el último Consejo de Ministros, generará un ahorro de 4.860 millones de euros anuales.

Durante su intervención en el pleno del Senado, la ministra ha dicho que en la actualidad el coste para la Seguridad Social de estas dos modalidades de jubilación es de 9.900 millones al año, que se reducirán a casi la mitad cuando la reforma esté completada.

Báñez ha afirmado que la racionalización de la jubilación anticipada era una de las recomendaciones del Pacto de Toledo para acercar la edad real de retiro a la edad legal.

En su opinión, "no tiene sentido" pedir a los españoles que retrasen la jubilación a 67 años, cuando en 2012 una de cada dos personas se retiraba de la actividad laboral antes de cumplir los 65 años.

La ministra ha respondido al portavoz de la Entesa, José Montilla, quien le ha preguntado en qué informes se había basado el Gobierno "para recortar drásticamente y sin consenso" el acceso a la jubilación anticipada y parcial, y el subsidio de desempleo para mayores de 55 años.

Aunque Báñez le ha explicado que ha habido más de quince reuniones del Pacto de Toledo para dialogar sobre las propuestas del Ejecutivo, Montilla ha insistido en que se trata de unos cambios sin debate ni consenso, al contrario de lo que ocurrió con la anterior reforma de las pensiones del Gobierno socialista en 2011.

Según Montilla, la reforma del PP presenta como insolidarios a quienes se jubilan anticipadamente y sólo servirá, al igual que la reforma laboral, para generar más paro y más desigualdad.