Dos días antes del encuentro de la Conferencia Episcopal, el pasado 22 de noviembre, el sacerdote José Félix Zamakona, de la Coordinadora de Sacerdotes de Euskal Herria, se entrevistó con el obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez, y le presionó para que impidiera la aprobación por parte de la cúpula de la Iglesia española de una pastoral de clara condena al terrorismo.

Según publica esta semana la revista Tiempo , Zamakona, perteneciente a la diócesis de Bilbao, "junto con otro sacerdote apellidado Zalacaín", se había entrevistado la semana anterior con "dos exparlamentarios de Batasuna incluidos en la lista de los dirigentes que ha imputado el juez Baltasar Garzón por su presunta pertenencia a ETA", y de quienes recibió presiones.