Batasuna movilizó ayer a su militancia en Alsasua (Navarra) para reclamar al PSOE un "impulso" al proceso de paz. Con sus principales líderes en un segundo plano, reunió a miles de personas bajo una fuerte vigilancia policial, aunque no se registró ningún tipo de incidente.

La manifestación de Alsasua se sumó a otras que tuvieron lugar ayer en el País Vasco, como la de San Sebastián (Guipúzcoa), donde la policía tuvo que disolver a decenas de personas que cortaban el tráfico, y la de Zarautz (Guipúzcoa), en la que se lanzaron vivas a ETA.

Los dirigentes de Batasuna Arnaldo Otegi, Joseba Permach, Juan Cruz Aldasoro y Rufi Etxeberria se incorporaron al grueso de la marcha, autorizada por el juez Baltasar Garzón. Todas las condiciones impuestas por el magistrado para permitir el acto fueron cumplidas. Batasuna no ocasionó ningún problema y la única pancarta de la marcha exhibía el lema: "Euskal Herria: autodeterminación".

En un punto del recorrido, dos enmascarados desplegaron el lema de la acción desde un edificio y, en otro punto, unos enmascarados protestaron por la situación de los presos etarras. En el acto final, uno de los organizadores cedió la palabra al Aldasoro, que declaró el viernes ante Garzón por esta misma manifestación. El dirigente batasuna dijo que la situación que vive el proceso de paz es "muy grave" y responsabilizó de ello al PSOE.

INCIDENTES Prácticamente a la misma hora, en Zarautz, un millar de jóvenes lanzaron vivas a ETA, en una marcha convocada por la ilegalizada Segi y en la que la Ertzaintza no intervino. Unicamente en un punto del recorrido de la manifestación estaba presente una dotación de agentes antidisturbios.

La protesta se desarrolló por las calles del centro del pueblo, repleto de personas de todas las edades que disfrutaban de las Euskal jaiak (Fiestas vascas). Los jóvenes reclamaron la independencia y la amnistía de los presos etarras y corearon lemas como "La lucha es el único camino". Los momentos de mayor tensión se produjeron al pasar la manifestación delante del batzoki (sede social) del PNV, mientras se gritaba "PNV, español". En el acto final se volvieron a corear vivas a ETA.

SENTADA DE PROTESTA Por otro lado, la Ertzaintza tuvo que disolver al mediodía una sentada protagonizada por decenas de personas en el Boulevard donostiarra. Los manifestantes reclamaban la excarcelación del etarra Iñaki de Juana Chaos, en huelga de hambre desde hace un mes. Tras cortar el tráfico durante unos minutos y lanzar consignas a favor de los presos, se presentaron varias furgonetas policiales y les obligaron a suspender la protesta.

Los agentes identificaron a algunos de los concentrados, instante en el que arreciaron los gritos, pero inmediatamente abandonaron la vía y se disolvieron sin más incidentes.

Por otra parte, un grupo de encapuchados lanzó en la noche del viernes líquido inflamable al paso de un autobús urbano en San Sebastián, aunque el conductor no se detuvo y evitó el incendio del vehículo. Además, varios individuos prendieron fuego a una barricada formada por neumáticos en Vitoria.